La salud de los niños es una prioridad en toda familia. Sin embargo, en la rutina diaria, muchas veces se pasa por alto un aspecto fundamental: la prevención. En Protegemos creemos que el cuidado de los hijos no comienza cuando se presenta una enfermedad, sino mucho antes, con acciones que garantizan su desarrollo físico, emocional y mental desde los primeros años de vida.

La importancia de los chequeos pediátricos regulares
Los chequeos médicos pediátricos no deben ser vistos únicamente como una respuesta ante síntomas. Se trata de espacios de evaluación integral en los que el pediatra puede:

• Realizar seguimiento al crecimiento y desarrollo.
• Detectar a tiempo condiciones de salud que no presentan síntomas evidentes.
• Verificar el cumplimiento del esquema de vacunación.
• Brindar orientación sobre nutrición, higiene, actividad física y salud emocional.

Estas valoraciones, realizadas de forma periódica, permiten intervenir de manera temprana ante cualquier alteración y promover hábitos saludables desde la infancia.

¿Con qué frecuencia deben realizarse?
La frecuencia de los controles pediátricos depende de la edad y las condiciones particulares de cada niño, pero en términos generales se recomienda:

Durante el primer año de vida: controles mensuales o cada dos meses.

• De 1 a 5 años: al menos dos controles anuales.
• Mayores de 5 años: mínimo un chequeo anual, incluso si el niño no presenta síntomas.

Además, es importante acudir al pediatra ante cualquier señal inusual, como alteraciones en el apetito, cambios bruscos en el comportamiento, problemas para dormir o dificultad para concentrarse.

Prevenir es un acto de amor y responsabilidad. A través de los chequeos pediátricos regulares, los padres no solo cuidan la salud de sus hijos, sino que también les brindan una base sólida para crecer sanos y felices. En Protegemos reafirmamos nuestro compromiso con la prevención, facilitando el acceso a servicios médicos confiables, oportunos y humanizados.

Porque amar también es anticiparse. Y cuando se trata de la salud infantil, cada control puede hacer la diferencia.